Ver que tu fondo de inversión está en números rojos no es plato de gusto. Te puede hacer dudar sobre si la estrategia que has seguido es la correcta o si el producto que has elegido es el idóneo para alcanzar tu objetivo financiero. Ahora bien ¿es buena idea reembolsar (o traspasar) un fondo sólo porque ha experimentado una caída? Lo cierto es que no. O no al menos cuando esa es la única razón que te lleva a salir de ese producto. Te explicamos por qué.
Plazo y volatilidad
Si tu fondo está en perdidas, lo primero que debes hacer es recordar cuál es la estrategia que te llevó a apostar por ese tipo de activo. Es esencial que el nivel de riesgo del fondo se adecúe a tu perfil como inversor así como al horizonte temporal en el que quieres recuperar el dinero. Además, es recomendable que este fondo forme parte de una cartera diversificada integrada por otros fondos y/o productos de inversión.
Te comentamos esto porque algunos inversores entran un fondo por las razones equivocadas. Quizá alguien te recomendó este fondo sin tener verdaderamente en cuenta tus intereses. O puede que fueras tú el que lo elegiste, atraído por los buenos resultados que obtuvo en el pasado reciente. Pero si el producto no se integra verdaderamente dentro de una estrategia que encaje con tus necesidades y con tu nivel de tolerancia al riesgo es muy posible que al primer susto que te dé el mercado te veas tentado a vender.
Por tanto, revisa cuál es tu objetivo financiero, el asset allocation por el que has optado y las expectativas que tienes para ese fondo. La bolsa es el activo más rentable en el largo plazo, al menos en términos históricos. Pero en el corto también es uno de los activos que experimenta más altibajos (o volatilidad). Si no estás preparado para asumir este hecho o si tu meta financiera es a corto plazo, entonces quizá ese no era el fondo adecuado para ti.
Cuidado con el market timing
Es posible que el nivel del riesgo del fondo sí esté en línea con tu estrategia de inversión pero que en presencia de una crisis puntual en las bolsas estés valorando realizar una salida “táctica” para volver a entrar en este u otro producto más adelante.
A este respecto, te recordamos que acertar con el mejor momento de entrada (o salida) del mercado es realmente complicado. Hasta el punto de que muchos de los grandes gurús del mundo de la inversión, incluyendo al mismísimo Warren Buffett, renuncian a hacerlo. Y no sólo por lo complicado que es anticipar cuál va a ser el siguiente movimiento de las bolsas. Además, existe el riesgo de salir demasiado tarde, cuando tu fondo ya se ha llevado la peor parte del castigo, perdiéndote encima la mayoría del rebote. En palabras del magnate inversor Peter Lynch, “se ha perdido más dinero intentando prever las correcciones y protegiéndose frente a ellas, que sufriéndolas realmente”.
En definitiva, si tu fondo ha caído porque las bolsas están atravesando una mala racha, cuidado con intentar hacer market timing. Recuerda que tus miras están puestas en el largo plazo y que la volatilidad en el corto forma parte del camino. Citando de nuevo a Lynch, “el destino de cualquier inversor lo marca su estómago”.
El producto correcto
También cabe la posibilidad de que te sientas decepcionado con el producto en sí. Que ya no confíes en la pericia del gestor. Si este es el caso, es importante que pongas el fondo bajo la lupa. ¿Lo ha hecho peor que el conjunto del mercado (representado en la figura del índice)? ¿Y que la media de sus competidores?
Otro factor que debes tener en cuenta es si esta mala racha que atraviesa el fondo es puntual o si le ha sucedido varias veces en el pasado. Por muy bueno que sea un fondo de inversión es prácticamente imposible que bata a su índice de referencia (y competidores) en todos los plazos temporales sin excepción. Lo habitual es que haya algún momento en el que lo haga temporalmente peor que los demás. Y si tu foco está en el largo plazo, quizá deberías darle algo más de tiempo para que te demuestre su valía.
En este sentido, es útil que leas los informes periódicos que emite la gestora, así como cualquier otro material adicional (newsletters, cartas a inversores, etc.), ya que suelen aclarar cuáles son los elementos que han influido en la evolución reciente del fondo, desde el entorno de mercado hasta las compañías que integran la cartera.
Por otro lado, revisa también cuál es la estrategia que sigue el producto. Algunas de ellas, como la inversión en valor (value investing), suelen tardar un tiempo en dar sus frutos. Si es un fondo de small caps, o que invierte en mercados emergentes, es probable que experimente más volatilidad en el corto plazo. Analiza en qué consiste esa estrategia y cuál es el plazo óptimo para que ofrezca sus mejores resultados.
Sin miedo a las pérdidas
Finalmente, es posible que hayas pasado por todos los pasos previos y aun así decidas que este fondo no merece tu confianza. Por ejemplo, porque tiene un nivel de riesgo con el que no te sientes a gusto. O porque está demostrando no ser capaz de batir a su índice de forma sistemática.
Si es así, entonces que no te tiemble el pulso. Igual de peligroso es salir de un fondo por las razones equivocadas que permanecer en él por simple aversión a las pérdidas. Y es que existe un sesgo en la psicología del inversor, que ha sido estudiado en multitud de ocasiones por las finanzas del comportamiento (behavioural finance), que consiste precisamente en eso: en la aversión a reconocer las pérdidas. En este caso, el inversor no deshace posiciones no porque siga confiando en el producto, sino porque vender supondría reconocer que esas pérdidas son reales. Hacer caja y asumir el dinero que has perdido. Una realidad que no todo el mundo está preparado para asumir, por lo que prefieren mantener la inversión con la esperanza, posiblemente infundada, de que la inversión se recuperará con el paso del tiempo.
En definitiva, salir de un fondo (o de cualquier otra inversión) sólo porque está en pérdidas es una mala idea. Pero también lo es permanecer en él sólo porque no eres capaz de asumir la derrota. Lo importante es que analices cuáles son las razones que te han llevado a invertir en ese fondo y cuál ha sido el comportamiento de ese producto con respecto al resto del mercado.