El año que hemos dejado atrás fue muy positivo para la renta variable. La mayoría de los índices cerró con avances de doble dígito. Sin embargo, hubo mercados y tendencias que sacaron especial provecho de este periodo de bonanza.
Los países protagonistas
Pakistán, Macedonia, Ghana, Kirguistán, Argentina… entre las bolsas más rentables en 2024 destacan, como es habitual, los índices de varias economías emergentes. La elevada volatilidad de estos mercados y el impacto de la inflación, que suele ser galopante en esos países, impulsa las subidas. Pero ojo: no es oro todo lo que reluce. Apostar por ese tipo de economías puede suponer un riesgo muy elevado, teniendo en cuenta el efecto divisa y los fuertes altibajos.
Esto no quita para que la bolsa emergente puede hacerse un hueco en tu cartera, pero lo aconsejable es invertir de forma diversificada y atendiendo siempre a tu nivel de tolerancia al riesgo y el horizonte temporal de tu inversión.
Por otro lado, si nos centramos en los principales índices de los mercados desarrollados, la clara ganadora fue la bolsa americana (el S&P 500 se anotó un 23%) y, más concretamente, el sector tecnológico. El Nasdaq se apuntó un 25%.
La buena racha de las tecnológicas también se ha dejado notar en los fondos de la categoría. De este modo, productos como el Echiquier Space, el Neuberger Berman 5G Connectivity Fund y el BGF World Technology Fund subieron por encima del 40% en 2024, según datos de MyInvestor.
Otro mercado que dejó un buen sabor de boca a los inversores fue el japonés. Tras la larga travesía del desierto que ha vivido la bolsa nipona durante años, parece que las últimas reformas económicas han despertado el apetito de los inversores, incluido el mismísimo Warren Buffett. De este modo, el Nikkei subió un 19% en 2024 y fondos como el BlackRock Japan Flexible Equity Fund y el Man GLG Japan CoreAlpha Equity Class se anotaron por encima del 26%. Eso sí, estas rentabilidades corresponden a la clase del fondo con divisa cubierta, ya que el yen experimentó un retroceso frente al euro/dólar.
¿Y qué tal lo hizo el mercado español? Pues por una vez sacó pecho frente a la media europea. El EuroStoxx avanzó un 8%, mientras que el Ibex subió un 14%.
Entre los fondos de bolsa española más rentables en 2024 figuran el Okavango Delta y el Magallanes Iberian Equity, mientras que el Rentamarkets Narval fue uno de los más alcistas en la categoría de renta variable europea.
Los ETF y acciones más alcistas
Más allá de los mercados geográficos, hubo sectores y modelos de negocio que triunfaron en 2024 por encima del resto. Y para ello, nada mejor que fijarse en los ETF que más subieron en el año. En este selecto club figuran los siguientes, según datos de Morningstar: VanEck Video Gaming and eSports, VanEck Defense y WisdomTree Blockchain UCITS. Todos ellos, con una revalorización superior al 50%.
En otras palabras, el sector que ha brillado con más fuerza ha sido el tecnológico. Y con especial intensidad las compañías ligadas a videojuegos, defensa y mundo cripto. Una tendencia que ya apuntábamos en este otro post, en el que analizábamos los fondos de inversión que encabezaron el ránking de rentabilidad en 2024, incluyendo todas las categorías.
En cuanto a las acciones individuales, hay varias compañías que han conseguido revalorizaciones superiores al 100% en 2024. Es decir: duplicar, y a menudo con creces, su precio en bolsa. Las que más han destacado en la bolsa americana han sido Lumen Technologies, con una escalada meteórica del 190%, y Nvidia, con un avance del 171%. Les siguieron Broadcom y Howmet Aerospace.
En la bolsa europea destacó el avance de Siemens, que se disparó nada menos que un 321%. Parece que la compañía alemana ha reconducido su situación financiera, lo que le ha permitido resarcirse con creces, tras el desplome del 32% que sufrieron sus acciones en 2023.
Por último, en la bolsa española la que voló más alto fue IAG. Se anotó un 106%.
¿Seguirán subiendo en 2025?
El hecho de que estos mercados, sectores y compañías hayan sido los que más beneficiados en 2024 no implica que vayan a seguir siéndolo en 2025 o que vayan siquiera a cerrar este año en positivo. En este sentido, recuerda que rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras.
A la hora de invertir es aconsejable determinar siempre las palancas de crecimiento que pueden hacer que una compañía o sector vaya a hacerlo bien desde el momento presente. Lo importante no es lo que ha subido hasta ahora, sino lo que puedan subir a partir del precio al que compramos hoy. De lo contrario, nos arriesgamos a entrar en un valor o sector demasiado tarde, cuando todo su potencial está agotado o incluso cuando esté a punto de afrontar una recogida de beneficios.
Dicho esto, ¿cabe la posibilidad de que la buena racha del sector tecnológico o de las compañías que hemos citado continúe? No hay un consenso al respecto. Pero en todo caso, ningún experto podrá ofrecer nunca la certeza absoluta sobre lo que va a hacer una compañía en bolsa. En ese sentido, lo más recomendable es construir una cartera bien diversificada (o invertir en una cartera de fondos), que incluya valores de mercados geográficos distintos y sectores de actividad descorrelacionados.